La sucursal bancaria de un pequeño pueblo está en quiebra. Para conseguir recuperar la confianza de los habitantes, los responsables del banco ofrecen el puesto de gerente al curita del pueblo, que empieza a realizar toda clase de préstamos y ayudas sociales a la gente. Una banda de gangsters que preparaba un asalto a la sucursal, decide cambiar de táctica. Los delincuentes solicitan un préstamo para construir una escuela. Piensan, por supuesto, escapar con el dinero, pero el cura tratará de llevarlos al buen camino.